Uno de los grandes regalos que como colegio católico podemos ofrecer a nuestros estudiantes es la preparación a los sacramentos. Por eso las primeras comuniones son una fiesta familiar y comunitaria. Esta vez, fueron 17 estudiantes de quinto básico y 2 de III medio que están preparando su confirmación, quienes recibieron a Jesús sacramentado por primera vez.
La preparación de este grupo contó con diversas actividades, como una salida solidaria acompañada por sus padres, momento de oración, lectio divina y el día antes de la primera comunión con un retiro y su la experiencia del sacramento de la reconciliación, el que fue vivido con mucho recogimiento.
Muy tempranito llegaron el sábado 5 de octubre a recibir este sacramento en un eucaristía bien cuidada que presidió el padre José Pablo Valencia, conocido como el padre Jota, quien con una homilía cercana y bajada a la realidad, mantuvo atentos y expectantes a jóvenes y sus familias.
Cada momento litúrgico estuvo animado por los mismos niños y niñas como el perdón, las lecturas, la oración universal y la acción de gracias.
Al final de la misa, el padre Jota animó a los presentes con cantos y coreografías que hicieron terminar la fiesta con mucha alegría.
La primera comunión es la bienvenida a la vida eucarística, a vivir el sacramento donde se parte, se reparte y se comparte el pan, que es el cuerpo de Cristo según el gesto que hizo Jesús con sus discípulos poco antes de morir.
