Los expertos en salud mental han advertido insistentemente acerca de los efectos postpandemia en el bienestar socioemocional de las personas, especialmente en los niños, niñas y jóvenes.
Según relata Carlos Olguín, psicólogo de nuestro Colegio SS.CC. Viña del Mar Monjas Francesas, a cargo del departamento de apoyo escolar, desde el año pasado, y después de la pandemia, el factor socio emocional siempre fue identificado como una variable importante, “y en los planes de trabajo de apoyo escolar, y en general el trabajo del colegio, era un elemento visible. Por eso este año lo que se evidencia es más profundo en ese ámbito que lo vivido el año pasado porque se hace complejo en intensidad y en cantidad. Entonces lo que hacemos es tomar la planificación estratégica y potenciar el eje socio emocional de bienestar y salud mental y ponerlo en el centro. Pero cuando lo potenciamos lo hacemos mirando a la comunidad en un todo, es decir hay que desarrollar acciones pero en todos los niveles; para eso tomamos las acciones que teníamos de trabajo con la familia. Y para ello vamos a reconvertir las jornadas que nosotros hacemos con los papás, y las vamos a unir a un espacio nuevo que queríamos realizar que es una jornada por curso”, afirma Carlos.
Para eso, durante la primera parte de cada reunión de curso de a mediados de mayo, fue el propio psicólogo quien se reunió con padres, madres y apoderados para explicar y contar lo relevante que se está transformando en este tiempo atender la salud mental en todas sus formas y a todo nivel.
En este contexto, la apoderada de 1º básico, Patricia Vega, dijo: “Yo agradezco el trabajo que está realizando el colegio en temas de salud mental y bienestar. y que nos ayuden a ser conscientes en que solo en conjunto podemos tener mejores resultados. Los temas de salud mental dejaron de ser realidades ajenas a nuestro entorno, no tan solo en el ámbito escolar, sino también en lo laboral y familiar, es por esto que las estrategias de abordaje referente a este tema que se están implementando en el colegio, entre todos los actores, refleja la preocupación, ocupación y apoyo a las familias y sus funcionarios. La intervención del psicólogo al inicio de la última reunión de apoderados, se destacó precisamente por hacernos un autoanálisis como madres y padres; si estamos siendo efectivamente cuidadores protectores de nuestros niños y si nosotros estamos también en condiciones óptimas para ser esos buenos cuidadores, además de anunciar el trabajo que viene en las jornadas”.
Dichas jornadas comenzaron el pasado sábado 3 de junio (ver fotos) y se extenderán hasta fines de julio, pues se espera una concurrencia importante, sino completa, a esta oportunidad fundamental en el proceso de formación de nuestras niñas, niños y jóvenes.
Entrenando para entrenar emociones
Ya se ha hecho un trabajo con docentes y asistentes de la educación en la lógica, según Carlos Olguín, de “cuidar a los que cuidan”. Pues, explica el psicólogo, “por más recursos personales que tengamos, necesitamos espacios en los que podemos, por un lado, contener y canalizar lo que nos pasa respecto de esto, y a la vez ir generando estrategias que nos permitan apuntar al autocuidado y al bienestar. De esa manera podemos tener profesores y personas que van a lidiar con esta complejidad día a día pero que también están siendo acompañadas desde el colegio, desde una lógica de instalación de una mirada protectora y de cuidado”.
Esto se suma al trabajo incansable que en los espacios de orientación, y otros especialmente generados, buscan ofrecer herramientas a niñas, niños y jóvenes para sobrellevar no solo lo que a cada uno le va pasando, sino que también a ser capaces de mirar el dolor o estado emocional del otro u otra, con empatía y compasión; emociones que hoy más que nunca debemos entrenar.
En conclusión, el Colegio SS.CC. Viña el Mar Monjas Francesas ha tomado una decisión consciente de priorizar el bienestar socioemocional y la salud mental de sus estudiantes. El enfoque en este ámbito se ha vuelto más profundo e intenso después de la pandemia, reconociendo la complejidad y la importancia de abordar estas cuestiones de manera integral. A través de la participación activa de la comunidad educativa y el desarrollo de estrategias específicas, se busca promover un ambiente escolar saludable y protector, donde cada individuo pueda desarrollarse plenamente.