La alegría de reencontrarse con quienes caminan en la esperanza de mostrar lo bueno que es la vida junto a Jesús, fue lo que vivieron los 23 integrantes de los equipos de las pastorales de los 4 colegios de la Congregación en su jornada anual en la casa de retiros de los franciscanos ubicada en San Francisco de Mostazal, los días 5 y 6 de abril.
Organizada por el equipo del Liceo SS.CC. San Javier, el encuentro se centró en el tema de la sinodalidad animados por Marcela Algaze y el padre Renzo Ramelli, quienes invitaron al grupo a reflexionar sobre cómo se camina en conjunto en las pastorales de los colegios en su realidad particular y a nivel congregacional, donde el centro del trabajo son las niñas, niños y jóvenes.
La invitación fue a comprender la experiencia sinodal como “atrevida, apasionada y enredada”, esta última expresión atendiendo a que el camino conjunto se hace en red, pues no se trabaja en solitario, sino que siendo parte de un todo.
El tema fue iluminado desde el tiempo de Pascua que estamos viviendo y en torno a las bodas de Caná, momento del primer milagro de Jesús, en contexto de fiesta y de “convertir el agua en vino”.
El mismo proyecto pastoral que tiene la congregación y que propone las líneas para el quehacer de las pastorales en los colegios, fue desmembrado para comprender el trabajo que se viene haciendo en esta línea del trabajo comunitario y circular que ofrece la sinodalidad y que de alguna manera ya está integrado en la espiritualidad de la congregación. Sin embargo falta mucho. Es necesario repensar el modo en que hacemos el trabajo pastoral considerando que los tiempos de renovación de la Iglesia son más lentos que los cambios sociales que impactan a las nuevas generaciones. También es un desafío distinguir la experiencia de fe, de la entrega de elementos de saber.
Renzo Valenzuela, del equipo de San Javier, dijo que “venía con hartas expectativas y creo que fueron logradas. En la medida que fuimos viviendo el encuentro nos dimos cuenta que hablar de la sinodalidad era hablar de lo cotidiano, de lo que sucede en cada colegio, de las luces y sombras que tenemos todos los lugares. Es bueno sentirse acompañado de la espiritualidad de los SS.CC. Vamos por nuevos desafíos este año”.
Durante la mañana del sábado también visitaron el encuentro el equipo directivo de San Javier para saludar al grupo y animar el trabajo de las pastorales.
